Miedo

Tengo miedo, eso es normal... Todos tienen miedos, todos temen a algo, todos temen perder algo, o alguien, todos temen perderse a si mismos, todos temen caer, todos temen perder el camino, todos temen cosas, es normal.
El miedo es bueno, el miedo te mantiene alerta, te mantiene vivo. Mejor sentir miedo que no sentir nada, pero el miedo a su vez es algo muy duro de sobrellevar...
Tener un poco de miedo no es malo, te Recuerda que eres humano, que hay cosas que te superan, que hay cosas que tú no controlas, cosas que te puede quitar aquello que amas, cosas tan cotidianas y a la vez desconocidas, cosas como el destino, el futuro, la vida y esas cosas, cosas que forman parte de tu historia pero no son cosas que tu escribas,son cosas que pasarán sin importar lo que hagas...cosas que están preparas para ti...
Llegó un momento en el que decidí esperar al destino, decidí que si él te tenía predestinado para mi tarde o temprano nos uniría, y así fue, pero ahora tengo miedo que en sus planes también esté el alejarme de ti, ¿Es así de cruel? ¿Como para llevarme a ti, esperar a que me enamorara, y luego alejarme? No sé la respuesta, y es prescisamente esa duda la que me hace terner miedo...
Mi miedo era esté, justamente esté, siempre lo supe y te lo dije, tenía miedo de depender de alguien, miedo de que mi felicidad dependiera de una persona, las personas no son algo en lo que se puede confiar, al menos eso creo yo, no puedes dejar que TU felicidad depende de alguien más que no seas tú mismo, porque las personas son inciertas e impredecibles, nunca sabes cuando una persona llegará o se irá, cuándo cambiará, cuándo desaparecerá... Pero ese miedo no sirvió de nada, en ves de mantenerme alerta para alejarme del peligro se quedó callado dentro de mí, los gritos fueron más fuertes, decidí arriesgarme, escapar de mi misma y de mis miedos...y heme aquí, ahora mi felicidad depende de ti...y no es que no confíe en ti, es que no confío en el destino que este escrito para nosotros, es decir, por más que yo sea la escritora de está historia, por más que esta sea nuestra historia, el destino no cambia, no se detiene, si para él está decidido el separarnos, tarde o temprano lo hará, y ese, cariño, es mi más grande miedo.